sábado, 31 de diciembre de 2011

Entre 2011 y 2012


Vuelve a ser 31 de diciembre y no se me ocurre otra cosa que tirar de recuerdos, como hacemos la gran mayoría. Y es que resumir este 2011 se me hace muy complicado. Son muchos recuerdos, muchas imágenes, muchas frases, muchas risas, muchas emociones y mucho trabajo, mucho esfuerzo, un gran aprendizaje y algún que otro momento menos agradable.

Antes de seguir, también soy consciente del parón del blog, y es que el resto de asuntos que giran a mi alrededor han sido muy exigentes durante este último periodo del año. Después de las 100 primeras entradas, decidí parar para tomar aire y dedicarme a cosas que realmente precisaban de toda mi atención. Pero para 2012 empezaremos lo que será la “2ª temporada” de algo que se convirtió poco a poco en mi diario de bitácora y que me ha permitido compartir todo lo que pensaba y sentía durante este año y pico largo.

El 2011 empezó con unos meses de altura. Y es que disfrutamos de aquello que se ha ido convirtiendo en una pasión y me ha permitido desconectar del mundo que vivía. También conllevó un gran esfuerzo en el terreno laboral: había que abrirse un hueco en un entorno competitivo y buscar mi lugar. Adaptación. ¿Por cierto, recordáis un Carnaval “Dominó”?

El año continuó su metamorfosis silenciosa. Unos meses de locura. Ya en 2010 asomó la locura; pero desde luego fue en 2011 cuando se apoderó de todo. Viví esperando el fin de semana sin saber que me depararía. ¡Pero qué más daba! Y por si fuera poca la locura, llegó el elemento sorpresa: conocí a gente increíble. En sólo unos meses conectamos un grupo de individuos con mucho en común. ¿Será la ciencia tan alucinantemente desequilibrante? La semana Santa de tejados verdes y barro hasta el cuello puso la guinda a un pastel que ya se veía irresistible. Ese sería el momento de descubrir a nuestro ídolo y de abrir la lata de esas risas que te hacen llorar. En mayo llegó la primavera, y con ella una colección de colores vivos y un vuelco de un mundo que, hasta entonces, era un poco más gris.

Siguió girando el planeta con mucho ritmo. Y es que el verano trajo la música. Muchas horas de melodías hipnóticas y de un ambiente único. Sería el descubrimiento de nuevas bandas y de un evento de dimensiones que no imaginábamos. No llevaba el verano las vacaciones de la mano, pero no me importó. Conocí a alguien de muy lejos que me ayudó tantísimo como para darme una energía tremenda para tirar adelante con mi trabajo, como siguen ayudándome tantas otras personas más cercanas. También recuerdo celebrar nuestro éxito académico en las aguas barcelonesas tras unas cuantas horas de fiesta, con desayuno incluido. El verano fue de la Costa Brava: una playa entre la niebla y un castillo iluminado en el mar dieron sabor mediterráneo a una época de calor y de muchas lluvias. Septiembre fue acabando con el calor entre emociones fuertes en la Costa Daurada y una Mercé como fin de fiestas donde conocí a gente con la que me cruzaría poco después.

El último trimestre de 2011 deparaba algunas de las sorpresas más espectaculares del año. Zaragoza puso la sal a un octubre de categoría. Y es que saber a mi edad que soy maño adoptivo tras más de 16 horas de fiesta y unas cuantas manchas de calimocho en la camiseta no era algo fácil de predecir. Después vino una de las fiestas de cumpleaños más especiales que recuerdo, con ansiados reencuentros y un ambiente espectacular. La semana seguiente llegó, después de dos meses de espera, el viaje. ¿Hace falta que diga más? Vale, que nevó mucho. Y vale, esquiamos más bien poco. Pero valió la pena. La semana siguiente, casi sin descanso, el sur me secuestró durante una semana.

¡Que sí, que sí! Ya paro... Esta noche brindaré por todas las personas que han entrado a formar parte de mi vida este año, por todas las personas que siguen girando a mi alrededor y por todos los que han hecho de éste un año especial.

Y a 2012... sólo le pido magia.


¡Feliz 2012!

jueves, 6 de octubre de 2011

Este mundo está loco, loco, loco


Hay días, e incluso semanas, en las que llegas a pensar que no merece la pena despertarse; que casi preferirías hibernar y deshacerte de ese letargo cuando la tormenta haya pasado. Que si el estrés, que si la falta de resultados, que si apenas cuentas con tiempo libre... Semanas, días, horas y minutos interminables. Y desde la ventana ves el sol brillar. Allí fuera.

Bueno... Vale... Quizás no hay que ser tan pesimista y el drama queda mejor en el teatro. Aunque estaréis de acuerdo con aquello de que la realidad, en muchas ocasiones, supera a la ficción. Y justifico: abres el periódico y lees que un juez considera que la palabra “zorra” proferida por un maltratador a su mujer no es un insulto ya que puede considerarse perfectamente como sinónimo de “astuta”. Mi humilde opinión: en primer lugar, creo recordar que el contexto forma parte de la comunicación y definen el mensaje que se transmite. Y segundo, ¡este juez es un hijo de zorra! (su mamá es muy astuta...).

Tampoco está mal que hablen de la boda que mañana se celebrará y en la que la Duquesa de Alba es su principal protagonista. Destacan en el informativo que su hija no podrá asistir porque tiene varicela. Casualmente toda la sintomatología ha aparecido a pocas horas de la celebración de tan importante evento. Que levante la mano quien se lo crea... Y que levante la mano quien crea, como yo, que no era necesario dar esta “noticia”. Gracias Tele5, 12 horas diarias de cotilleos nunca son suficientes...

Y finalmente los hay con un coeficiente intelectual negativo (es decir, por debajo de 0). Es el caso del joven que se metió a robar en una tienda en Buenos Aires y, una vez que tuvo todo escondido y bien recogido en su bolsa, creyó divisar un ordenador en una mesa del local. No dudó en utilizarlo y revisar su Facebook, cosa que dio tiempo a la policía para detenerlo. Otra sanguijuela que desearía llegar a la categoría de ser humano es Esperanza Aguirre, que ha declarado que el movimiento del 15M es un grupito pequeño de gente totalitarista y que son los iniciadores de un golpe de estado. Claro, ¡sólo un grupo minoritario y nazi está en desacuerdo en que sinvergüenzas como tú cobren más de 9.000 euros al mes!

Para rematar: el Hormiguero ha sido nominado a los Emmy internacionales. ¡El mundo se va al carajo!


Mean street, de Mando Diao:

Let me take you for a ride
far away from the upper side
we're going down to the mean street

Johnny's got a brand new 38
he thinks it's gonna cure his hate
Ah it's all done in the mean street

It's the state of grace

and It's all done in the mean street

Take my hand and close your pretty eyes
cus it's gonna hurt so much when summer hits
New Nork sky
oh no, it's all done in the mean street

God I love this stormy cloud
Where all nasty girls they like it loud
It's all good in the mean streets

Diane had her grand debut here
Michael couldn't even tell if it was
pleasure or fear
It's all done in the mean street

and It's my little state of grace

It goes down in the mean street

Take my hand and close your pretty eyes
cus it's gonna hurt so much when summer hits
New York sky
oh no, it's all done in the mean street

The heights, the sights, the green, the
scarred
the easy way of doing everything hard,
the fashion
Oh I hate that street with... passion

Take my hand and close your pretty eyes
cus it's gonna hurt so much when summer hits
New York sky
oh no, it's all done in the mean street
it's all done in the mean street
it's all done in the mean street.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Entusiasmo en cuarto menguante


Durante la más tierna infancia escuchas en numerosas ocasiones aquella típica pregunta: ¿y tú qué quieres ser de mayor? Supongo que en aquel momento empiezas a ser consciente de que en el futuro te tocará trabajar para poder vivir, pero no te preocupa ya que aún sigues viendo el mundo como un enorme parque de juegos y eso de trabajar incluso suena divertido. Recuerdo que una de las primeras respuestas que di a tal cuestión fue cartero. Pues sí, eso de ir paseando por el barrio, saludando a los vecinos con una sonrisa generosamente dibujada en la cara y repartiendo noticias, acertando en los buzones de mis conciudadanos, me parecía de lo más entretenido. Supongo que existe la posibilidad de que hayas sido más clásico durante tu niñez y una de tus primeras respuestas haya sido policía, bombero, mecánico, profesora o veterinaria.

Creces un poco más y cada vez te parece menos un juego. Empiezas a plantearte que la cosa va en serio, pero aún reina un cierto componente onírico en la decisión. Descubres que eres más de ciencias (mates y natus) que de letras, así que te planteas que de mayor quieres ser médico. ¡Qué entrañable eso de curar a la gente y hacer de éste un mundo mejor y más sano! El idealismo ciega cualquier atisbo de razón. El corazón sigue mandando sentado en su trono de un lejano planeta situado en una galaxia a miles de millones de años luz. ¡Pero qué más da eso ahora! La vida sale...

Te haces mayor y toca volver a elegir. La universidad está a la vuelta de la esquina y tú sigues sin saber qué hacer. El realismo, sin embargo, viene hacia ti a toda velocidad. Pero tranquilo, aún está lejos y le falta algo de tiempo para llegar. Tu pensamiento ahora se centra en no equivocarte al tomar una elección, esta vez sí, trascendental. Descubres que no te ves el resto de tu vida sentado en un cómodo sillón de tu consulta diagnosticando gripes y faringitis y aflora de tu interior ese idealismo hippy que otrora mandó en tu peliaguda existencia. Decides que quieres aportar algo al mundo y, más concretamente, a la ciencia. Estudias farmacia (por ejemplo...). ¿Que por qué? Pues porque tiene salidas, porque tiene algo que ver con aquella medicina que tanto me atrajo en el pasado y porque en el futuro me proveerá de un billete directo al interior de la ciencia. Ahora es una decisión (más o menos) firme pero deja un regusto extraño a “¿y si hubiera...?”. Da igual, ya no hay vuelta atrás.

Acabas tus estudios universitarios. ¡Genial! ¿Y ahora qué? (la eterna pregunta...) Mis planes tradicionales llegaban hasta aquí. Lo siguiente que recuerdo de las entrañas de mi imaginación es que ahora tocaba trabajar, ganarse bien la vida, tener familia... Error, en este preciso instante viene lo difícil. La decisión más dura: ¿Seguirás a tu joven entusiasmo por el camino espinoso del que quiere hacer realidad un sueño o seguirás el camino de rosas que intuía la imaginación? Difícil, difícil, difícil... Ya que tienes la oportunidad de elegir (no todo el mundo la tiene), y sin saber bien por qué, decides seguir el camino idealista y cumplir tu sueñode juventud. Te dedicas en cuerpo y alma a la ciencia.

La investigación, que lleva llamándote desde el primer día que entraste en un laboratorio (por aquellos tiempos en que eras un inocente escolar), llena tu espíritu pero no tu bolsillo. Te exige un gran esfuerzo mental y físico y te lleva a enfrentarte a situaciones emocionalmente extremas. ¡Aventura! Un salto sin red en el que no tienes más remedio que aprender a volar. Por fin ha llegado aquel realismo que se acercaba a toda velocidad y choca contigo de frente. Es una amante caprichosa y celosa que no siempre quiere complacerte. Mientras tú pones la pasión, ella pone el desenfreno. Aunque en honor a la verdad hay que reconocer que el día en que decide sorprendente la recompensa es muy dulce y está rellena de algún tipo de droga bastante euforizante.

Resumiendo, cuando eres un niño el futuro es algo fantástico y maravilloso visto a través de un filtro de color rosa en el que podrás ser lo que quieras ser y la vida estará más que resuelta con cierta facilidad. No obstante, todo ese entusiasmo se va perdiendo paulatinamente a medida que el filtro se va destiñendo y la realidad se deja ver tal y como es. Un consejo: no dejéis escapar jamás a ese niño que vive dentro y que sigue coloreando cuadros en blanco y negro.

Esta canción me parece alucinante: If I don’t live today, then I might be here tomorrow, de Mando Diao.

Take my hand of funeral flowers in white.
Why did you hurt me so?
You said that you never stood out,
so go kiss Ann on the cheek.

She's never weak,
she likes the way you betrayed me.
But don't forget...

If I don't live today, then I might be here tomorrow
If I don't live today, then I might be here tomorrow

Be here tomorrow.

Watch me shine, as all the lights closes down
It's just a talent of mine
You know I die whenever I want
So go chase fortune when I'm gone
I'm guilty of reading my own past.
Don't forget...

If I don't live today, then I might be here tomorrow
If I don't live today, then I might be here tomorrow

Be here tomorrow.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Él ha despertado


Llevo una semana sin apenas dormir. Camino arrastrando los pies y los ojos rojos me delatan. Los oídos se han vuelto selectivos y no son capaces de captar todos los sonidos, solamente filtra aquellos que le ordena la atención. Los bostezos continuos hablan sin palabras y los párpados se cierran en cuanto tienen ocasión, incluso en los momentos más inoportunos. El sueño me hace parecer vulnerable. Pero Él se ha despertado.

La semana le ha sido propicia. Pensaba que por fin había conseguido encerrarlo casi definitivamente. Me equivocaba. Tiene mal despertar y tras su letargo suele estar muy hambriento. Recordaréis que se alimenta del dolor ajeno. Pero no de cualquiera, sino de aquellos que merecen sentirlo. Es impaciente y no se conforma fácilmente con un “no”.

Y ahora es tarde para volver hacia atrás. Se ha adueñado de mí y no descansará hasta quedar satisfecho. Consecuentemente, yo tampoco podré descansar hasta entonces. Por suerte, se encargará de proporcionarme suficiente adrenalina para mantenerme alerta. La batalla ha comenzado: Él contra mí, o los dos contra el mundo. Un equilibrio difícil cuando se trata de alguien que vive en mi interior.

No sé quién ganará pero sé quién pierde seguro. Tarde o temprano me tocará pagar por aquellos errores que no he cometido. Mientras tanto, los que sólo cuentan con ese ser oscuro seguirán alimentando el agujero negro de sus almas con los ojos fundidos en blanco. Autodestructivos e inconscientes. Viviendo en un mundo falso e irreal, sin verdades ni mentiras, sólo el reflejo de lo que antes fue su vida. Encerrados en una jaula de arrepentimientos fingidos o de frágil orgullo de cristal. Mirando por la ventana que da al universo de los logros, la honestidad y la realidad que jamás habitarán.

Él contra ellos. Un choque de trenes, una colisión interestelar de consecuencias imprevistas. Un golpe de autoridad. Sólo puede quedar uno...


A pain I’m used to, Depeche Mode:

I'm not sure what I'm looking for anymore,
I just know that I'm harder to console.
I don't see who I'm trying to be instead of me
but the key is a question of control.

Can you say what you're trying to play anyway?
I just pay while you're breaking all the rules.
All the signs that I find have been underlined,
devils thrive on the drive that is fueled.

All this running around, well it's getting me down.
Just give me a pain that I'm used to.
I don't need to believe all the dreams you conceive,
you just need to achieve something that rings true.

There's a hole in your soul like an animal
with no conscience, repentance unknown.
Close your eyes, pay the price for your paradise.
Devils feed on the seeds that are sown.

I can't conceal what I feel, what I know is real.
No mistaking the faking, I care
with a prayer in the air I will leave it there.
On a note full of hope not despair

All this running around, well it's getting me down.
Just give me a pain that I'm used to.
I don't need to believe all the dreams you conceive,
you just need to achieve something that rings true.

jueves, 25 de agosto de 2011

Expecting my Personal Jesus


Por fin de vacaciones. ¡Qué ganas tenía! Estas últimas semanas han sido una locura, notaba al mundo conspirando contra mí. Será que realmente necesitaba este descanso. Sin embargo, los diarios siguen relatando esas historias dantescas que se acompañan de imágenes en su amiga televisión.

Hace pocos días se inició en Madrid una revolución. Y no, no me refiero al movimiento 15M. Este movimiento es mucho más antiguo, aunque vino con costumbres y aficiones renovadas y adaptadas a los nuevos tiempos. Evidentemente me refiero a la famosa JMJ2011.

Resumiendo: se monta en Madrid una macro-concentración de gente joven y no tan joven a modo de rave de sábado por la noche en la que los asistentes ya están suficientemente destruidos como para ponerse de acuerdo en qué cantar. Pero si salió en las noticias no fue sólo por la gran afluencia internacional de gente, sino porque había una gran estrella invitada al evento. Al más puro estilo concierto de rock, su nombre era coreado y se le pedía que acompañase a tanto fervoroso seguidor en la ola que se había iniciado. ¡Ese papa como mola, se merece una ola, uh!

Yo, atónito en mi sofá, me preguntaba de dónde había salido tanta gente y porque aquellos jóvenes no estaban en un concierto de rock/pop/Hip Hop y estaban derritiéndose a 30ºC a la sombra. Sentí algo extraño en mi interior: ¿cómo era aquello posible en nuestro mundo del siglo XXI? Si un refrán cobraba sentido era aquel de que El hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.

Algunos puntos que me gustaría destacar. En primer lugar, las noticias anunciaban (después del papa, eso sí) que el cuerno de África estaba sufriendo una gran epidemia de hambruna y que muchos niños estaban muriendo a diario. ¡Pero al cuerno África! Es mucho más importante gastarse 50 millones de euros en traer a la gran estrella del rock a Madrid a... bueno, a hacer eso que hace tan bien... ¿a hablar? Y toda la pasta que se dejaron los peregrinos en el viaje también podría haber sido donada. Claro que donar el dinero no es tan divertido como venir a ver a nuestro ídolo y, ya de paso, nos montamos una buena fiesta por Madrid. ¡Ah no! Que ni alcohol, ni música moderna y sensual, ni trasnochar.

Otro asuntillo es algo que han hecho perfectamente bien: convertir sus ritos en un espectáculo digno del más casposo vodevil. ¡Ahora vamos a montar un par de hileras maravillosas de confesionarios portátiles en medio del retiro! Eso, a modo de retretes portátiles. En este macro-festival las necesidades van más allá de las drogas. No es de extrañar que la iglesia haya superado todos los cástings y haya entrado en su particular Gran Hermano, destapando su vida privada y vendiéndola al mejor postor. Y además se disfrazan del concursante enrollado y guay, y vierten declaraciones como las mujeres que hayan abortado, estén arrepentidas y pidan perdón en Madrid serán libradas de la excomunión. ¡Interesante! ¿Quizás eran demasiadas seguidoras perdidas? Ya se van acercando, ya... ¡Con buen pijo bien se jode!

Por último, cabe destacar la desinhibición de ciertos grupos de individuos. Y es que ir a España es siempre sinónimo de fiesta. Y subrayo siempre... Me chocó enormemente ver a un gran grupo de monjas haciendo la ola animadamente, a grupos de peregrinos bailando sin mesura el waka waka y botellas de sangría recorriendo gargantas sedientas. También es cierto que los bares lo habrán agradecido...

Concluyendo (que me enrollo más de la cuenta): no hacía falta ir a Madrid. Ni por parte de la gran estrella ni de sus fans. El show mediático ha sido efectivo y ha conseguido su objetivo de aparecer en todos los medios, pero ha sido un espectáculo sucio. Otros lo definirán de lamentable. No está mal venderse, pero no se vale hacerlo a cualquier precio. Y conste que no tengo nada en contra de ninguna creencia, simplemente juzgo lo que he visto y el modo en que se ha llevado a cabo este evento.


Abrimos un álbum de los 80 para recordar el Personal Jesus de Depeche Mode:

Reach out and touch faith

Your own personal Jesus
Someone to hear your prayers
Someone who cares
Your own personal Jesus
Someone to hear your prayers
Someone who´s there

Feeling unknown
And you´re all alone
Flesh and bone
By the telephone
Lift up the receiver
I´ll make you a believer

Take second best
Put me to the test
Things on your chest
You need to confess
I will deliver
You know I´m a forgiver

Reach out and touch faith
Reach out and touch faith

Your own personal Jesus
Someone to hear your prayers
Someone who cares
Your own personal Jesus
Someone to hear your prayers
Someone who´s there

Feeling unknown
And you´re all alone
Flesh and bone
By the telephone
Lift up the receiver
I´ll make you a believer
I will deliver
You know I´m a forgiver

Reach out and touch faith

Your own personal Jesus

Reach out and touch faith

martes, 9 de agosto de 2011

Esas cosas que nadie te cuenta y que deberías saber (II)


Hoy, una de aquellas frases pesadas que caen del cielo en los momentos difíciles. Es una frase que captarás en la conversación aunque curiosamente no suele pronunciarse. Aprendamos la lección, pues: No tienes razón, la culpa es tuya.

Efectivamente, es una frase matadora (o un killer statement, si lo preferís). Surge en plena discusión, cuando ésta llega a su punto más álgido. Suele aparecer cuando tu argumento es tan contundente que no puede ser rebatido. Es una huida dolorosa del adversario, ya que te deja en la estacada con la vena del cuello hinchada a reventar. Pero espera, el enemigo ha vuelto, y lo hace para regocijarse de su hazaña cobarde, disfrutando de un placer infinito al ver tu cara cambiando de color.

Destacaré algunos puntos relevantes del Manual de las buenas maneras en la discusión.

Primero: Esta frase no debe ser utilizada bajo ningún concepto en una discusión en la que queramos sacar alguna conclusión razonable o no acabar suficientemente sulfurados como para sentir esa necesidad interior irrefrenable de romper algún objeto que se encuentre a nuestro alcance (en el mejor de los casos es un objeto...). Generalmente, los interlocutores de una discusión aluden a elementos subjetivos normalmente opuestos diametralmente a los de su rival dialéctico. Recuerdo que los elementos subjetivos no suelen expresar verdades absolutas ni suelen representar a la totalidad de las situaciones posibles.

Segundo: No se debe intentar zanjar una disputa con variantes de esta afirmación tales como “es que siempre que discutes pretendes llevar la razón”. Ésta no es más que una obviedad teniendo en cuenta que no existiría tal debate en el hipotético caso en que uno de los individuos implicados no quisiera llevar la razón. Lo que quiero decir es que resulta evidente que la discusión se produce por la disparidad de opiniones entre emisor y receptor, y viceversa.

Tercero: La culpa no pertenece, por norma general, a un solo individuo. El simple hecho de que se proceda a discutir es en sí mismo culpa de dos o más personas. En raras ocasiones se han reportado casos de discusiones sonoras de un individuo consigo mismo que hayan terminado con la frase en estudio, y en tales casos se han clasificado como situaciones patológicas.

Cuarto: El momento en que se pronuncia tal sentencia resulta un punto de inflexión en la discusión a partir del cual no cabe otra posibilidad que no sea un empeoramiento de la situación. O lo que es lo mismo, las cosas sólo pueden ir a peor. No existe antídoto ni parche para retomar la conversación ni para volver a un punto anterior dominado por la razón. La gravedad de la situación futura dependerá de la capacidad de ambos interlocutores de templar sus emociones y de su habilidad de no pronunciar palabras superfluas. Para entendernos, de su paciencia y su capacidad de tener la boca cerrada.

Bien, espero que estos consejos os resulten útiles en esas ocasiones incómodas pero inevitables que todo ser humano debe soportar en su vida. Aunque lo mejor es no enfadarse demasiado, así que... ¡paciencia!


La letra de esta canción es una reivindicación a la honestidad que otorga reconocer los propios errores y aprender a equivocarnos. Lori Meyers y su Luces de neón:

Si tan sólo con mirarte
encuentro una razón,
a veces denigrante,
con luces de neón...

Sí, se hace la interesante,
mano en su pelo va,
curvando hacia adelante,
con luces de coral....

Pa pa ra pa pa pa.
Tendría que reconocer que no llevo razón.
Pa pa ra pa pa pa.
Tendría que reconocer que no llevo razón.

Sé que mi amor es inmigrante de tu corazón,
a veces palpitante, y otras con terror,
y otras con terror.

Pa pa ra pa pa pa.
Tendría que reconocer que no llevo razón.
Pa pa ra pa pa pa.
Tendría que reconocer que no llevo razón.
Pa pa ra pa pa pa.
Tendría que reconocer que no llevo razón.


Con luces de neón ...

domingo, 7 de agosto de 2011

Encuentra la paz


Tras su expresión ruda, sus tatuajes y su look más bien descuidado se escondía una voz no menos que privilegiada. Nos dejó una mujer de una delgadez acentuada y un peinado beehive con personalidad. El moño negro desmesurado es una huella de identidad difícil de olvidar...

La ironía quiso que su primer hit se titulara Rehab y rezase versos de un realismo brutal tales como they tried to make me go to rehab and I said no, no, no. Quizás la autobiografía musical de la artista fuera su mejor carta de presentación. Al fin y al cabo, el personaje era parte del atrezzo musical... El estribillo sentenciaba diciendo que ella no iría a rehabilitación (but I won’t go, go, go) y continuaba asegurando que no podrías enseñarle nada (there’s nothing you can teach me). ¡Lástima!

Ya lo advirtió con su You know that I’m no good. Su vida sirvió la polémica que no podía ofrecer su interpretación: no había debate posible en reconocer el talento de una voz como esa. ¿Una voz negra en unas cuerdas vocales blancas? Sí, era posible contra todo pronóstico. Y aunque se propusiera detener la autodestrucción que tiempo atrás activó, su sino fue volver al oscuro mundo al que pertenecía (Back to black).

Su swing enmudeció el pasado 23 de julio en Londres, su ciudad natal, a los 27 años. Se suma a este crudo club de los 27, que agrupa a varios cantantes que fallecieron a esta edad, véase Kurt Cobain, Jimi Hendrix o Jim Morrison. Tras conquistar varios premios MTV EMAs y Grammys se fue la mezcla de jazz y soul mientras sus fans esperan que sus propias lágrimas se sequen solas (Tears dry on their own).

No puedo decir que yo fuera un gran fan de la artista, pero en cierta parte admiraba su talento. Reconozco que me da cierta lástima que se tenga que perder un timbre tan característico como el de la cantante.

En fin, espero que haya donde vayas encuentres la paz que no encontraste aquí, Amy.


Como homenaje, dejo el Back to black de Amy Winehouse:

He left no time to regret.
Kept his dick wet
with his same old safe bet.

Me and my head high,
and my tears dry
get on without my guy.

You went back to what you knew,
so far removed from all that we went through.
And I tread a troubled track,
my odds are stacked,
I'll go back to black.

We only said good-bye with words,
I died a hundred times.

You go back to her
and I go back to...

I go back to us.

I love you much,
it's not enough,
you love blow and I love puff.

And life is like a pipe,
and I'm a tiny penny rolling up the walls inside.

We only said goodbye with words,
I died a hundred times
.
You go back to her
and I go back to...

martes, 2 de agosto de 2011

¿Estío o hastío?


Guardad vuestras esperanzas bajo llave, no es momento de sacarlas a relucir. Lo digo por vuestro bien: pensad que es lo último que podríais llegar a perder.

2 de agosto de 2011 y sigo sin disfrutar de un fin de semana soleado como corresponde a esta época del año. A tomar por saco aquello de “este año iré más días a la playa que el año pasado”. La primavera se ha olvidado de largarse. Y no satisfecha con ello, ha conseguido provocar en mí un cuadro clínico de estornudos, rinitis, astenia y dolor de cabeza muy típico de agosto... ¡Gracias!

Por otra parte, me he hartado de ver los informativos y leer los periódicos, sobretodo la sección de política. ¿Nos han tomado a todos por gilipollas? Ahora nuestro particular Míster Bean, después de subrayar hace dos meses la importancia de terminar la legislatura para cumplir objetivos (¿será hundir aún más la economía un objetivo firme?), anuncia que finalmente habrá un adelanto de las elecciones. ¡Ojo! que asegura que la decisión estaba meditada desde hace tiempo. ¡¿Cuánto hace?! ¡¿Mes y medio?! Casualmente lo anuncia en el preciso instante en que se da a conocer que las encuestas señalan un recorte de 2,5 puntos del PSOE al PP por el ya llamado Efecto Rubalcaba.

Y hablando de Rubalcaba... Seguramente su habla tranquila y pausada esconda las tonterías que la razón no pasa por alto. Poca vergüenza tienes: asegurar que vas a intentar explicar a los españoles la solución a la crisis, que tú sabes, es de récord. Primero por tomarnos por idiotas, ya que no sabes cómo explicarnos algo (es tu trabajo; bien que sabes pedir el voto...) y segundo por asegurar que tienes la solución a la crisis y no llevarla a cabo cuando estás en el poder. ¿Tengo que pensar que es un chantaje? ¿Que sólo saldremos de la crisis si te votamos?

A favor del representante del PSOE diré que los otros, los azulitos, han asegurado también tener la solución a la crisis y no la han dado. Estas palabras podrían sonarle al expresidente del gobierno o a la siempre simpática y querida Espe. La niña de Rajoy está flipando: no hay “chuches” que compensen tanta canallada. Y ellos, mientras, a verlas venir.

Total, que en un país de charanga y pandereta, la política no busca el bien del pueblo ni estas chorradas absurdas que se han creído clásicamente y de forma idealista. Ahora la elección de nuestros representantes se basa en dos pilares: el que miente con más clase y el que parece que va a robar menos. ¿La solución? Lo primerísimo es proporcionar la cultura política e histórica que la población requiere desde tiempos inmemoriales. La ignorancia es un mal endémico de la población de esta región incluida, no sé cómo, en la Comunidad Europea. Lo siguiente, exigir una formación adecuada a los dirigentes del estado.

Al final, la conclusión es que tenemos lo que merecemos, aunque muchos no estén de acuerdo...

¡Hala! ¡Feliz “verano”!


Abriendo el Realimentación de Supersubmarina encuentro este Puta Vida:

No pasaré a la acción,
por ahora no pisaré el asfalto con la espalda.
Volveré a pensar en todo lo que nunca me gustó.
Perderé en mis pesadillas arreglando el mundo.


Y no pasaré a la acción,
no hará falta,
no pensaré en la próxima jugada,
y aunque no sirva de nada jugaré mis cartas, yo...

Aunque no resulte, aunque sea inútil;
ya no necesito Dios, que me falta amor.
Puta vida ésta que me tocó.

Ahora necesito un cambio

Te juro que no puedo más,
pero me da igual: sólo me dura un segundo.
Luego vuelves a atacar, y me pides paz,
yo me creo el rey del mundo.
El rey del mundo.

Vete, ya no puedo más, déjame ya en paz.
O quiéreme tanto como para sellar.
Necesito gas, reina de mis miedos,
dime la verdad,
dime que yo ahora ya no necesito un cambio...

Te juro que no puedo más
pero me da igual, solo me dura un segundo.
Luego vuelves a atacar, y me pides paz
yo me creo el rey del mundo...
¡El rey del mundo!

Y por la ley inevitable de la vida de que todo lo que sube vuelve a bajar...

Solo caí al asfalto...

miércoles, 27 de julio de 2011

Escenarios eléctricos


Gafas de pasta rojas, deportivas a juego y una camiseta desenfadada con una camisa de cuadros desabrochada encima. Siguiendo el rastro de las notas musicales que aún no han sonado pero sonarán acabamos delante del escenario, todavía apagado. La gente se empieza a agolpar delante de él. Se apagan las luces y Benidorm, a nuestras espaldas, desaparece para ceder el protagonista a un tímido foco que despierta y observa al cantante de nuestro grupo preferido.

Bajo el eslogan Grandes momentos te esperan el solista se acerca al micrófono mientras empieza a sonar una melodía terriblemente familiar que despierta al resto de luces de colores del lugar. La piel de gallina es el síntoma inequívoco de que la canción que está abriéndose paso en tus oídos es la que esperabas a oír. Te empiezas a animar, al igual que tus vecinos de concierto, y no puedes evitar entonar, por no decir gritar, cada sílaba del tema mientras los pies siguen el ritmo. Llega el estribillo y resulta imposible no levantar las manos y saltar, poseído por cada nota de la partitura que guarda esa melodía.

El concierto acaba entre aplausos y gritos pidiendo más canciones casi desesperadamente, con las piernas pesadas y con las cuerdas vocales seriamente perjudicadas. Nada que no cure una cerveza bien fresquita y un rato estirado en el césped.

Y eso fue el Low Cost Festival 2011. Me quedo con un buen número de conciertos geniales, con el ambiente desenfadado y con el recuerdo de un fin de semana largo de esos que dejan huella. Y, por supuesto, con la compañía. Por no alargarme demasiado, simplemente destacaré la energía de Mando Diao, el buen rollo de Mika, el descubrimiento de Lori Meyers en directo, la potencia de Fangoria y el prometedor futuro de Supersubmarina. Y muchos otros grupos que me sorprendieron muy gratamente.

Realmente no sé qué más puedo decir. Como experiencia es alucinante. Si os gusta la música, no dejéis escapar alguno de estos festivales veraniegos. Reclutad a los compañeros de festival y carretera y manta. Feel the music!


Imposible definir a este grupo. Me han enganchado desde las primeras notas musicales que escuché. Y después de escuchar las 4 nuevas canciones que han lanzado recientemente me declaro adicto. El directo que ofrecieron en el Low Cost Festival 2011 no deja ninguna duda: han venido para quedarse. De momento, reabro el disco Electroviral con este Eléctrico. Pronto abriré el nuevo EP, Realimentación. ¿Qué quiénes son? Supersubmarina.

Porque fueron muchas noches en las que no podía dormir,
y no dormí.

Porque fueron mil historias y todo lo que llegué a sentir,
sufrí, sin ti.

Y fueron muchas veces las que quise llamarte o verte,
me acojoné, lloré y me fui.

Algo giró en mi barriga,
la fricción me provocó algo que no podré explicar,
algo parecido a una descarga,
algo parecido a un huracán.

Como un impulso eléctrico... eléctrico... eléctrico... eléctrico.

Porque me temblaron las entrañas y me pudieron las ganas
de estar aquí.

Y porque siempre he sido el mismo idiota distraído
que se esconde, que se rinde, que no sabe lo que dice.

Me acostumbré a decir que no y perdí todas las esperanzas.
Hasta que el sol me atravesó,
me partió del pecho hasta la espalda,
me partió en dos con su descarga.

Como un impulso eléctrico... eléctrico... eléctrico... eléctrico...

martes, 12 de julio de 2011

Estafadores y lilas


Sigo alucinando. La población mundial nunca tiene suficiente. Y en concreto la de este país parece no saciarse jamás. Por eso siguen innovando en el campo de las idioteces varias y los “sinsentidos”. Y gracias a nuestra amiga televisión nos enteramos de esta realidad, muchas veces narrada a través de un filtro muy amarillo. Agarraos fuerte.

Resulta que me da por ver ese programa en que la Milà se pone las botas insultando a todo aquel que infringe la ley. Ella, jueza suprema, se jacta de las malas acciones de los más desconsiderados y construye un programa en que los protagonista no son las víctimas de estafas, robos o palizas sino que es la superheroína más querida de la televisión, otrora presentadora del reality más sociológico (o Gran Hermano).

Al grano: explican la historia de una señora que sufrió un infarto cerebral y sufre de una pérdida de sensibilidad en la parte derecha del cuerpo (hemiparesia derecha). Resulta que la señora pidió los servicios de una supuesta fisioterapeuta que se proclama también psicóloga y no sé qué más y proclama que puede curar el cáncer y el SIDA. Además la señora no tiene consulta; va a tu casa, te cobra 100 euros por adelantado y te tira en el suelo para hacerte la rehabilitación. Le dice a la afectada que tiene que aprender a aguantar el dolor.

Resultado: La afectada ha perdido sensibilidad en su parte derecha, agravando su enfermedad. La conclusión no está tan clara: ¿es la afectada una víctima de la estafadora, o es una ingenua? Y aún digo ingenua por no decir idiota. ¿Qué le hace pensar que una mindundi de ese calibre puede curarla si en el hospital no pueden hacerlo? Es más, ¿cómo te fías de que tal sinvergüenza cure el cáncer? Juzgad vosotros mismos.

En otro de los casos del programa aparecen un señor que se autodenomina sanador y su hijo que vende un agua “milagrosa”. El señor, de edad avanzada, asegura que puede curar el cáncer, el SIDA y otras enfermedades, entre ellas la homosexualidad, con esa agua mágica. Total, que a una pareja de redactoras que se hacen pasar por lesbianas no sólo las acosa físicamente sino que les hace preguntas tan delicadas como “¿Alguna vez te la ha metido un hombre?” Y su cura consiste en beber el agua milagrosa y en mantener relaciones sexuales con un hombre disfrazado de mujer. Según el timador, no es un hombre porque está disfrazado, por más que se empeñaran las supuestas lesbianas en decir lo contrario.

Por cierto, ¿sabéis qué era el agua? Agua pantanosa no potable. ¡Salud!

Amigos, citando al gran Pedro Piqueras, esto me parece “terrible, apocalíptico”. Pero no sé que me parece más sorprendente, si el que exista gente con tan poca vergüenza y con esa capacidad elevadísima de mentir descaradamente o el que conviva con nosotros gente tan lila como para creerse al primer inútil que se autoproclama salvador del mundo. ¡Se abre la discusión!


La canción de hoy va dedicada a Mercedes Milà, por su gran labor televisiva y, sobretodo, social. Porque gracias a ella me siento protegido. Ahí va este Superheroi, de Marc Parrot:

Veig els perills, enemics i amenaces,
lladres de cors i botins d’esperances,
cantants que volen matar-te de pena
i embaucadors oferint confidències.

I jo somio amb ser el teu protector,
del teu somriure el més gran defensor,
el que el teu cor incendiarà
i el teu desig farà esclatar.

Em sento un superheroi, defensor de la veritat,
em sento un superheroi que sap estimar sense fer mal,
el campió dels campions en afrontar les situacions.
Un superheroi, superheroi, superheroi.

Amb els meus trucs sorprendré l’adversari
i dels meus ulls no hi haurà qui s’amagui.
Faré un escut contra atacs i venjances
i amagatalls on poder refugiar-me.

I volaré en pijama i capa,
i em faré insígnies amb paper de plata,
i una espasa amb un bastó
i una careta de cartró.

Em sento un superheroi, defensor de la veritat,
em sento un superheroi que sap estimar sense fer mal,
el campió dels campions en afrontar les situacions.
Un superheroi, superheroi, superheroi.

miércoles, 6 de julio de 2011

Ejercicio... ¡1, 2, 3!


Estamos comprometidos con la vida sana. Empieza por E cumple hoy una labor social importante. Vamos a promocionar el ejercicio físico: el ejercicio físico, practicado con asiduidad, aumenta las capacidades pulmonar y cardiaca, ayuda a regular la presión arterial, previene el insomnio, disminuye el estrés, libera la tensión acumulada durante el día a día, ayuda a corregir las posturas incorrectas y aumenta la vitalidad y la energía del individuo. Por si fuera poco, el ejercicio mejora ciertas capacidades como la resistencia, la fuerza muscular, la flexibilidad, las habilidades motoras y la psicomotricidad. Y algo más: últimamente tiene un papel destacado como potenciador del sex appeal definiendo la silueta y eliminando esas zonas con grasa acumulada tan antiestéticas.

¡Qué a gusto se queda uno cuando contribuye así a la sociedad! ¿Cómo decís? ¿Que cómo practicáis el ejercicio? Veamos...

Podéis apuntaros a un gimnasio. El gimnasio es ese lugar en el que se concentra la fauna más variopinta y estrafalaria de la urbe. Os encontraréis con los ciclaos exhibicionistas: se les llama así por los ciclos de hormonas que supuestamente se chutan y por su atuendo atentamente escogido. Su aspecto físico desproporcionado no cuadra con la cantidad de ejercicio que realizan, exceptuando un músculo peculiar: la lengua, que ejercitan a la perfección. Son esa peña que está en el centro de la sala de fitness hablando con cada individuo que se les cruza por delante (claro, pasando allí 5 horas al día se conocen hasta la programación de la tele...) o delante de un espejo contemplándose a sí mismos. ¿Querrán ligar con ellos mismos?

Luego están las Barbies fashion: ¡Van monísimas! Están informadas de las últimas tendencias en moda deportiva y te lo querrán hacer saber. ¡Claro, tía! El bolso tipo saco de patatas con agujero negro en el fondo que traga todo lo que le metes y luego no encuentras nada y las bambas rosas a juego con el short ajustado rodillero y un escote hasta el ombligo son lo más confortable para esto del gimnasio. Ahora, que eso de correr y levantar pesitas no, que cansa...

Otra especie son los frikis mataos. Sí, amigos, existen frikis que se matan en el gym. Sus pintas los delatan: camiseta del Dark Side, calcetines blancos hasta media espinilla con rayas de colores (quien no ha tenido unos...), gafas y una curiosa cinta rodeando su cabeza a la altura de la frente. Se matan a correr en la cinta corredora visiblemente: desde el minuto 1 están chorreando sudor por la frente (sí, ya ha traspasado la cinta de su cabeza...) y sus pies se arrastran elegantemente por ese peligroso suelo móvil. Pero las melodías manga no dejan de sonar a través de sus auriculares y el show debe continuar. El momento de parar estará marcado por un acontecimiento clave: el empañamiento de las gafas por culpa del sudor. ¡Sigue pedaleando, pequeño Padawan! ¡Pronto serás un auténtico jedi o un Chuck Norris en su defecto!

Por último, pero no por ello menos importantes, los deportistas natos. Curiosa raza. Van al gimnasio, sí. Van a hacer ejercicio... más bien no. Este personaje sube a la sala de fitness, corre 2 minutos y se cansa. Prueba fortuna con alguna triste máquina de pesas, pero al repetir 4 veces el mismo movimiento queda exhausto. Se queda estático y mira a su alrededor: ninguno de los ingenios avistados parece suficientemente interesante. Decide bajar de nuevo al vestuario y, ataviado con un bonito bañador y una toalla reluciente, se acerca al jacuzzi y se adentra en la sauna. Ha sudado, sí, pero sin moverse. ¡Qué taimado!

Qué queréis que os diga... Ahora que es verano, casi mejor practicar el Voley playa (¡vaya vaya, cómo mola!).


Subiendo pulsaciones con este Dynamite, de Taio Cruz:

I came to dance, dance, dance, dance
I hit the floor
'Cause that's my, plans, plans, plans, plans
I'm wearing all my favorite
Brands, brands, brands, brands
Give me space for both my hands, hands, hands, hands

Cause it goes on and on and on
And it goes on and on and on


I throw my hands up in the air sometimes
Saying "ayo"
Gotta let go
I wanna celebrate and live my life
Saying "ayo"
Baby, let's go

'Cause we gon' rock this club
We gon' go all night
We gon' light it up
Like it's dynamite

Cause I told you once
Now I told you twice
We gon' light it up
Like it's dynamite

I came to move, move, move, move
Get out the way me and my crew, crew, crew, crew
I'm in the club so I'm gonna do, do, do, do
Just drop the phone, came here to do, do, do, do

Yeah, yeah

Cause it goes on and on and on
And it goes on and on and on


I throw my hands up in the air sometimes
Saying "ayo"
Gotta let go
I wanna celebrate and live my life
Saying "ayo"
Baby, let's go

'Cause we gon' rock this club
We gon' go all night
We gon' light it up
Like it's dynamite

'Cause I told you once
Now I told you twice
We gon' light it up
Like it's dynamite

I'm gonna take it all out
I'm gonna be the last one standing
I'm alone and all I
I'm gonna be the last one landing
'Cause I, I, Believe it
And I, I, I
I just want it all
I'm gonna put my hands in the air
Hands in the air
Put your hands in the air...

domingo, 26 de junio de 2011

Esas cosas que nadie te cuenta y que deberías saber


Amigos, hay tantas cosas que nos cuentan durante nuestra vida que no son verdad... También es cierto que hay cosas que nadie nos cuenta. Y vivimos engañados en una nubecita de algodón mientras las verdades quedan ancladas en la tierra. ¡Pero tranquilos! Hoy vamos a destapar una de esas mentirijillas...

“Nos tomamos una sola copa y volvemos para casa”

Sí, supongo que alguna vez la habéis oído. ¡Es descaradamente mentira! El código genético humano no contiene esa información. Existe un ancestral mecanismo evolutivo que impide a cualquier persona cumplir esa nimia misión.

La cosa empieza cuando te llaman y te dicen aquello de: “¿Nos vamos a tomar algo y hablamos un rato? Pero volvemos pronto a casa, sólo una...” Si tu respuesta es sí, has pringado. En el momento en que publicas en Facebook (o red social similar) tal evento, pasarán dos cosas (en este orden): primero se reirán de ti haciéndote saber que el concepto que propones es harto imposible de realizar; seguidamente, un grupo de aventureros sociales se pondrán a prueba y se apuntarán al evento, desafiando a la madre naturaleza.

Hasta aquí todo correcto. “Quedamos a las 12 de la noche”. ¡Muy bien, eres un campeón! Te has autocondenado a una larga noche y un duro despertar. Pero no desesperemos tan rápido, aún puede suceder el milagro. Nos vemos en la salida del metro, nos saludamos y nos acercamos a un bar tranquilo pero con una amplia variedad de cócteles en su carta. Y todos muy apetecibles... En fin, haciendo gala de mi mejor acento cubano (que resulta coincidir con el peor...) pido un mojito. Y entre jijís y jajás el vaso va quedando vacío, acompañándose de ¿me dejas probar tu daiquiri de fresa? y de ponme otro mojito...

Las 2:30. O el mundo de repente es maravilloso y cachondísimo o me han engañado y el mojito llevaba alcohol (porque entre sus ingredientes no figuraba ningún licor, al menos que esté yo mal informado sobre el ron...). Claro, malgastar esta alegría repentina e invertirla en sueños que mañana ni siquiera recordaré no me parece de lo más inteligente. Y al resto de colegas tampoco parece vencerles el sueño. De acuerdo, salimos un ratito más.

Llegas al centro después de 4 fotos y un video en el metro. Te ríes de las pintas de los cuatro guiris que trasnochan al ritmo de la noche. Antes de entrar en el local que te verá bailar al son del rock y otras músicas que se irán sucediendo, lo mejor es un chupito de tequila. ¡Ojo! que no era por gusto, sino más bien por conseguir entrar al local musical gratuitamente. No sea que malpenséis a estas alturas.

A todo esto, ¿no íbamos a llegar a casa pronto? ¡Genial! Misión cumplida, hemos madrugado: son las 7:30 y es hora de desayunar. ¿Quién dijo que no se puede madrugar después de una noche de fiesta? Y acabas la velada-mañana con aquella mítica frase: ¡ya me habéis vuelto a liar! ¡Si yo no quería!

En conclusión, eso de tomar una y para casa es una gran falacia, ¡pero qué narices! Al final, la buena compañía engancha y lo que iba a ser una noche más se convierte en una velada digna de recordar. ¡Dichosas mentiras!


Para todos los liantes y fiesteros incorregibles, una de The Strockes: Last night

Last night, she said:
"Oh, baby, I feel so down.
Oh it turns me off,
When I feel left out"

So I walked out:
"Oh, baby, don't care no more
I know this for sure,
I'm walkin' out that door"

Well, I've been in town for just about fifteen minutes now
And Baby, I feel so down
And I don't know why
I keep walkin' for miles

See, people they don't understand
No, girlfriends, they can't understand
Your Grandsons, they won't understand
On top of this, I ain't ever gonna understand...

Last night, she said:
"Oh, baby, don't feel so down.
Oh, it turns me off,
When I feel left out"

So I, I turn 'round:
"Oh, baby, gonna be alright"
It was a great big lie
'Cause I left that night, yeah

Oh, people they don't understand
No, girlfriends, they won't understand
Your grandsons, they won't understand
And me, I ain't ever gonna understand...

Last night, she said:
"Oh, baby, I feel so down.
See, it turns me off,
When I feel left out"

So I, I turn 'round:
"Oh, little girl, I don't care no more.
I know this for sure,
I'm walking out that door," yeah

sábado, 11 de junio de 2011

Entonces llegó la ironía


Tiempos difíciles para ciudadanas de bien como la lógica y la inteligencia, que se han resguardado en sus casas para no salir hasta que pase la tormenta. Se ha impuesto la ironía. Una ironía con esbirros tan numerosos como molestos.

Uno de sus más peligrosos lacayos es la idiotez. Vestida de señorita decente, sus argumentos parecen formidables en primera instancia, pero tras ellos la verdad queda disfrazada de payaso de circo. Son muchos los que se dejan embaucar por sus finas palabras sin percatarse de la vacuidad de sus argumentos. Así acaban, cometiendo las estupideces más memorables de su triste existencia o proponiendo las ideas más disparatadas. Sucede finalmente que la idiotez deja a la vista su lengua viperina a la vez que deja en bragas a quién la ha seguido con fervor. Y es que, aunque parezca increíble, son muchos los seguidores de esta señorita de vida alegre.

Luego pasa lo que pasa: se critica a los demás por ser antisociales cuando a ti no hay dios que te aguante; das sorpresas que no dejan a nadie con la boca abierta; propones planes sin tener planes; dices lo primero que se te pasa por la cabeza sin pensarlo antes...


Otra malvada seguidora de la ironía es la soberbia. Se viste con chupa de cuero y su tupé será el único que llegue a las estrellas, como si se tratase de un cartel con luces de neón señalando al triunfo personificado. Cuando posee a los humanos les provoca un trastorno mental que distorsiona la realidad. De manera que se creen en el centro del universo y creen conocer siempre la verdad sin poseer la más mínima cualidad que les haga dignos de ello. Los verás siempre de puntillas, haciéndose visibles para la gran multitud que les sigue con vehemencia.

Luego pasa lo que pasa: creen que todos quieren pasar tiempo con ellos, aunque en realidad sean lo suficientemente aburridos como para dormir hasta al café; te regañan y te miran por encima del hombro hasta que reciben una respuesta que los descoloca; se creen geniales en todos los campos y creen salvar a la humanidad con su presencia pero no se dan cuenta de que no sirven ni para estar escondidos...


Fiel compañera de la ironía es la ignorancia. Pobrecita: no sabe que está haciendo aquí, no sabe adónde va, pero da tanta penita... Que algunos deciden acunarla entre sus brazos. Es tan tierna y da muy pocos problemas, no debes de preocuparte de saber nada de ella, es feliz con el simple vaivén de tus brazos. Sin embargo, es una ilusión. Crees tenerla en tus brazos pero se escurre disimuladamente y empieza a borrar tu mundo. Se adueña de todo cuento puede y deja un vacío blanco por allá por donde pisa. ¡Oh no! El individuo que la tiene entre sus brazos está perdido. ¿A quién seguirá ahora? (los que no acunáis a esta bicha supongo que os hacéis una idea...).

Luego pasa lo que pasa: piensan que este personaje es un crack; no tienen opinión formada sobre un gran abanico de temas; son perezosos mentales...


Y así sucede que la ironía ha decidido hacerse con el poder. Irónicamente, los más tontos suelen tener suerte, al igual que los más perversos. Irónicamente, la ignorancia despunta sobre la inteligencia aún no siendo muy amiga de la lógica. E irónicamente, tú que eres un ciudadano de bien no encajas en esta horda de cerebros carcomidos por el desuso y de movimientos hipnóticos sin destino.


Hoy simplemente comparto unas frases de la canción Boca en la tierra, de Vetusta Morla. ¡Feliz fin de semana!

La antena está abierta esperando una señal,
la señal que no llega a esta sala de espera es una eternidad.

Y el tesoro perfecto lo cubrió la tormenta
con aviones cruzándose en la noche más negra.

Y en mitad del relámpago llegó el mal de altura;
fuimos sed en el aire pero boca en la tierra.

domingo, 5 de junio de 2011

Entérate


Las crisis de edad más duras no vienen el día de tu cumpleaños. Si pensabais eso es que estáis muy equivocados. El día del cumpleaños ejerce el efecto “sangría de vino: bebo y olvido”. Todo estará concebido para que sea un día feliz y placentero en que el problema del paso del tiempo quede difuminado entre confeti de colores y un pastel con tu nombre.

Sin embargo, otros eventos fortuitos e inesperados pueden devolvernos a la realidad. ¿Cómo sé que me estoy haciendo mayor? Cuando eres un niño y pasas de vivir la dulce rutina de pintar cuadernos e imitar animalitos a cargar con el peso de una cartera rellena de amargos deberes. O cuando toca escoger entre las letras de Cervantes y las ciencias Newton, abriendo en muchos casos un gran dilema y una incertidumbre con la raíz en el futuro incierto.

De repente, 18. Ya puedes conducir, votar, entrar a ciertos locales de juego y ocio, ver películas que antes no estaban recomendadas para ti, comprar alcohol y tabaco y, sobretodo, conseguir esa independencia moral que estaba retenida por la tutoría de tus padres. Ahora existes para el mundo en todos los sentidos, para bien y para mal: podrán penalizarte plenamente por tus malas acciones (también recibirás la correspondiente regañina de tus padres, ¡eso no te lo quita nadie!) y recaerá toda la responsabilidad sobre ti. ¡Qué gran paso!

Sabes que ya has dejado de ser un niño cuando hay que trabajar y reducir los 3 meses de vacaciones a, probablemente, 0 días (quienes deciden estudiar y trabajar suelen reducir muy drásticamente sus vacaciones). Cuando te das cuenta de que el trabajo y los estudios que has decidido continuar libremente (esta vez) son a la vez tu cruz, tu gran satisfacción y tu medio de vida. Y allí al fondo, muy muy lejos, vislumbras la palabra futuro escrita en una pared de ladrillos a medio construir.

Te haces mayor: tus amigos empiezan a casarse y tú aún vives tu teenage dream particular. No pasa nada, piensas. Estos se han dado mucha prisa, muchos de mis amigos son singles todavía... Correcto, pero casi todos tienen un buen trabajo y se ganan la vida lo suficientemente bien como para independizarse y “empezar a volar”. Y tú sigues con tu plan idealista de trabajar de lo que te gusta: no tiene un duro, pero sería tan genial contribuir significativamente al bien del mundo con mis manitas... ¡Soñar no es tan gratis como cuentan!

Así que es cierto. Personalmente, lo reconozco: me estoy haciendo mayor. La rodilla me da guerra de vez en cuando, no aguanto tantas horas de fiesta como lo hice antaño, a veces estoy de un humor más bien agridulce y agradezco más que nunca mis 8 horas de sueño. Pero, ¡qué narices! He aprendido, he crecido, he amado, he viajado, he disfrutado, he soñado una vida y he vivido un sueño, he ido, he vuelto, he sido, soy y seré... Y lo voy a seguir haciendo. Así que voy a ser como el vino: mejoraré con los años.

...el tiempo no se toca, ni se oye, ni se huele. Sin embargo, sólo lo verás pasar una vez para no volver jamás y notarás el sabor dulce o amargo que deja a su paso.


En 1984, una neoyorkina lanzó una canción que sería conocida en todo el mundo, convirtiéndose en uno de aquellos números 1 inolvidables. Esa sería la razón por la que ese tema quedaría grabado en las cabezas de todos los que formamos parte de su futuro y se versionaría en repetidas ocasiones. De hecho, hasta 120 artistas y grupos han grabado esta canción, entre ellos Miles Davis, Boyz II Men, Russian Red y Dover entre otros. Fue nominada como mejor canción para los Grammy en su vigésimo séptima edición. Seguro que la habéis oído una y otra vez. De hecho, ese es el título: Time after time, de Cindy Lauper.

Lying in my bed I hear the clock tick,
And think of you
Caught up in circles
Confusion is nothing new
Flashback warm nights
Almost left behind
Suitcases of memories,
Time after

Sometimes you picture me
I'm walking too far ahead
You're calling to me,
I can't hear what you've said
Then you say go slow
I fall behind
The second hand unwinds

If you're lost you can look and you will find me
Time after time
If you fall I will catch you I'll be waiting
Time after time

domingo, 22 de mayo de 2011

Esta es nuestra revolución


Hace unos cuantos días que tengo la piel de gallina. Quizás ahora, más que nunca, siento que estamos escribiendo una página muy importante de la historia. ¿Y quién no se estremece sabiendo que nuestra voz se escuchará en el futuro cuando algún niño lea en sus libros de texto del colegio lo que hicimos? Bien, quizás es un poco pronto para asegurar que las páginas de sus libros nos nombrarán, pero sería de justicia hacer al menos mención de todo esto.

Hace unos días la calle se convirtió en la protagonista de un movimiento sin precedentes: la manifestación pacífica del desacuerdo colectivo con la gestión de nuestras instituciones. O en otras palabras: el desacuerdo con los políticos y las políticas que llevan a cabo. Al fin y al cabo, la palabra política deriva de una expresión griega que viene a decir algo así como “ética de la polis”, y si el trato que recibimos por parte de los que mandan no se ajusta a la moral, podemos ir despidiéndonos de lo que entendemos como “el bien para el pueblo”.

Quiero remarcar la implicación de los jóvenes en este movimiento y subrayo su sentido cívico y su afán de integración. Nadie está excluido de un movimiento que clama por aquello que legítimamente nos corresponde como seres humanos y que figura en la declaración de los Derechos Humanos: es lamentable que nos tengamos que echar a la calle para pedir una vivienda digna y un empleo para desarrollarnos tanto económica como profesionalmente. Es más que alarmante el hecho de que el acceso a la vivienda sea tan complicado (mientras nuestros padres podían pagar una hipoteca en 10 años, ahora no se contempla la idea de pagarla en menos de 40 ó 50 años) o de que jóvenes con titulaciones universitarias trabajen en puestos muy por debajo de su cualificación profesional, a media jornada y cobrando cantidades irrisorias.

En cientos de plazas de nuestra geografía se leen pancartas tales como “No hay pan para tanto chorizo” o “Si no nos dejan soñar, nosotros no les dejaremos dormir” bajo las que duermen miles de jóvenes unidos por una causa e implicados en una batalla social para mejorar nuestro entorno. Y vuelvo a destacar el papel de los jóvenes, a los que se nos acusa de nuestra falta de sentido político y despreocupación social. A los que nuestros mayores nos repetido hasta la saciedad aquello de “Si hubierais pasado una guerra sabríais lo dura que es la vida...” Y miradnos ahora: en pie por garantizar nuestro futuro y el de todos. Y cada vez son más las personas de todas las edades que se unen a un movimiento inaudito y ejemplar.

En unas horas quizás veamos los primeros signos de este movimiento sin precedentes o quizás debamos esperar al futuro para observar un nuevo giro. Aunque lo más significativo es que la unión y la esperanza están escribiendo una nueva página de nuestra historia... y de la historia del mundo.


Para todos aquellos que creen que otro camino es posible. Revolución, de Amaral.

Somos demasiados y no podrán pasar
por encima de los años que tuvimos que callar.

Por los libros prohibidos y las entradas secretas.

Por todos los que un día se atrevieron a gritar
que la Tierra era redonda y que había algo más
que dragones y abismo donde acababan los mapas.

Por las noches de vacío cuando te ibas a dormir,
esperando que la suerte volviera a sonreír,
con los ojos abiertos esperando un milagro.

Siento que llegó nuestra hora;
esta es nuestra revolución...


Somos demasiados y no podrán pasar
por encima de la vida que queremos heredar,
donde no tenga miedo a decir lo que pienso.


Por todas las canciones que empiezan a nacer
para no ser escuchadas y al fin lo van a ser,
cantadas con rabia por los que siempre callaron.

Siento que llegó nuestra hora;
esta es nuestra revolución...

Somos una luz cegadora,
fuerte, más brilante que el Sol.

Porque siento que este es el momento
de olvidar lo que nos separó
y pensar en lo que nos une.

martes, 17 de mayo de 2011

Escarlata


Escarlata eran mis zapatillas nuevas. Después de una ducha para despertarme, ponérmelas fue el paso previo a salir cargado con mi mochila a disfrutar de un nuevo sábado. El volante en las manos y el pie en el acelerador, el sol ha decidido mostrarse esplendoroso. Las gafas de sol son imprescindibles en esta mañana de calor.

Escarlata era el estampado de aquel pañuelo, que rodeaba el cuello protegiéndolo del tímido viento de la ciudad. No tardaría, sin embargo, en empezar a ondear dentro del coche en sentido contrario a nuestra marcha. Fue testigo de aquellos kilómetros que nos separaban de la gran ciudad i que fueron la distancia necesaria para desconectarnos de la realidad.

Escarlata era la vela de aquel barco que acariciaba el horizonte. Con un mar azul en calma y el resplandor solar reflejándose en su arena, la playa fue el refugio al fuego cruzado de la semana. Estirado sobre la toalla, y con el ruido de las olas de fondo, los minutos pasaron con presteza.

Escarlata era el mango derecho de una cometa. Una cometa que decidió surcar un cielo claro y sereno, dejándonos en tierra como hipnotizados con su movimiento. Cortó el viento a su antojo y se hizo visible para tanto cuantos estuvieron cerca. A decir verdad, todos la envidiamos un poco. Más alta que nadie, su única preocupación consistía en dejarse llevar. ¿Dónde nos llevaría el viento? La gravedad es a veces cruel y nos ata fuertemente al suelo.

Escarlata era aquel gambón, o lo que quiera que fuera. Mi interés por estos animales es demasiado escaso como para elogiar su existencia o su costumbre mediterránea de aparecer en ciertos platos casi por sorpresa. Mejor es dejarlo donde está. No quisiera enfadar a Neptuno insultando a sus criaturas...

Escarlata era el cartel luminoso de aquel aparcamiento privado indicando que estaba “Completo”. Mala suerte. Ni el cielo fue capaz de mantener la compostura y se puso a llorar. Y el día celeste que amaneció se transformó en gris. Pero mis retinas no fueron capaces de notar la diferencia y siguió luciendo el sol. Mi realidad seguía teñida de azul.

Escarlata era el ovillo de lana que puso en mis manos el azar. Aunque el que arrojé al vacío fusionándose en una tela de araña de tantos colores fue verde. La ciencia puede teñirse de tantos colores como existen. Y el arte se camufló en ella ingeniosamente, tentando al intelecto a participar en aquel enrevesado juego de verdades y falacias.

Escarlata es un día, un momento y un lugar. Y seguro que todos vosotros habéis vivido uno de ellos...


Para todos aquellos que hace tiempo que no vivís uno de esos días, para aquellos que estáis sufriendo y para los que necesitáis un respiro: esta canción es para vosotros. Maldita dulzura, del nuevo CD de Vetusta Morla (¡más que recomendable!).

Hablemos de ruina y espina,
hablemos de polvo y herida.
De mi miedo a las alturas;
lo que quieras, pero hablemos
de todo menos del tiempo
que se escurre entre los dedos.


Hablemos para no oírnos,
bebamos para no vernos.
Que hablando pasan los días
que nos quedan para irnos,
yo al bucle de tu olvido,
tú al redil de mis instintos.

Maldita dulzura la tuya.
Maldita dulzura la tuya.
Maldita dulzura la tuya.


Me hablas de ruina y espina,
me clavas el polvo en la herida.
Me culpas de las alturas
que ves desde tus zapatos.

No quieres hablar del tiempo
aunque esté de nuestro lado.

Y hablas para no oírme,
y bebes para no verme.
Y yo callo, río y bebo;
no doy tregua ni consuelo.
No es por maldad, lo juro,

es que me divierte el juego.

Maldita dulzura la mía.
Maldita dulzura la mía.
Maldita dulzura la mía.

Maldita dulzura la nuestra.

viernes, 6 de mayo de 2011

Especímenes: Homo Insapiens Popularis


Nos ha fallado. Después de tanto tiempo, la evolución se ha tomado un respiro y ha dejado en bragas a la especie humana. Después de miles de años de selección natural, resulta que un relativamente nuevo espécimen escapa del calabozo en que la Madre Naturaleza esconde aquello que no es digno de pisar su tierra sagrada. O quizás esté tan enfadada con nosotros que se trate de un nuevo castigo por su parte.

Entre multitudes descarriadas y jaleos altisonoros aparece el Homo Insapiens Popularis. A simple vista y de lejos parece pertenecer a la raza humana considerada como normal, pero una observación más detallada nos permitirá distinguirlo de otras especies.

Volcando los 5 sentidos en la observación será sencillo reconocerlo entre la multitud. Su actitud altiva es su principal rasgo. Dentro de su entorno será el que más cacarea y su personalidad pavoneante lo delatará. Se centra en el grupo y lo defiende a ultranza con sólo palabras, pocas veces con acciones. Ejerce el papel de líder que él mismo se ha autoimpuesto y tiene el privilegio de aleccionar a sus “súbditos” en caso de que lo crea conveniente. Fuera de su entorno pierde sus cualidades más características: su labia infinita y su postura de único gallo del corral se diluye hasta desaparecer.

Lo más curioso de este espécimen es que suele vivir en un tiempo pasado que considera como eje de su existencia. Su vida gira alrededor de esa época dorada mientras recrea los acontecimientos que le han transformado en lo que es. Se siente complacido por su aspecto físico y se autocomplace pensando en su mente privilegiada y en sus más que admiradas habilidades sociales, aunque ninguna de ellas destaque ante los ojos de cualquier individuo considerado normal.

Curiosamente, el Homo Insapiens Popularis requiere cambiar rasgos de su personalidad y conductas típicas en él cada cierto tiempo, imitando y haciendo propias las de otros individuos. Su personalidad no es fija, por lo que se deduce que no posee una en concreto. De este modo mantiene hipnotizados a aquellos a los que considera como sus seguidores. Experto vendedor de humo, acudirá a cualquier evento sin necesidad de preocuparse por ningún aspecto de su organización y criticando cada error o eventualidad si lo cree necesario, echando las culpas públicamente al blanco que le apetezca. Esto constituye una de sus tareas más importantes como justiciero del grupo.

Consejo: No os dejéis intoxicar. La hipnosis es sólo para profesionales.


La canción de hoy viene como anillo al dedo. Unnatural selection, de Muse:

They'll laugh as they watch us fall
The lucky don't care at all
No chance for fate
It's unnatural selection
I want the truth!

I'm hungry for some unrest
I wanna push it beyond the peaceful protest
I wanna speak in a language that they will understand

Dedication to a new age
Is this the end of destruction and rampage?
Another chance to erase, then repeat it again

Counter balance this commotion
We're not droplets in the ocean
Ocean

martes, 26 de abril de 2011

Eusebio y su cuento por escribir


Eusebio se sentó ante su ordenador portátil y abrió su procesador de textos. Tenía claro que el premio del concurso de cuentos sería suyo. El tema era bien sencillo: un viaje ideal. Después de un trago de agua, puso sus dedos sobre el teclado y los dejó en libertad.

Érase una vez un joven millonario de familia pudente. Un día...

- No, espera - Pensó. Quizás debía enfocarlo de otra forma.

Érase una vez un joven como cualquiera de nosotros, de un barrio humilde y trabajador. Un día le tocó un sorteo: unos billetes de avión a un país exótico y un hotel de 5 estrellas...

- Mmmmm... Sigue sin encajar. Una vez más, volvió a comenzar.

Érase una vez un joven como cualquiera de nosotros, de un barrio humilde y trabajador. Un día de primavera partió de viaje. Aprovechando sus pocos días de vacaciones y tirando de sus escasos ahorros, se embarcó en lo que él consideraba una aventura. No iba lejos, ni siquiera abandonaba su país. Pero se alejaba de aquella jungla de asfalto que tantas veces le ahogaba. Cuando llegó a la habitación del lujoso hotel que había pagado con tanto esfuerzo...

- Algo falla... - Se dijo a sí mismo. Borró el último fragmento.

[...] Pero se alejaba de aquella jungla de asfalto que tantas veces le ahogaba. Cuando llegó a su destino, le sorprendió que allí pudieran convivir más de dos personas. La comodidad no iba a ser la consigna de su viaje. Sin embargo, la compañía era inmejorable. Estaba con quienes quería estar. Sin lujos ni comodidades, ni siquiera le acompañó el tiempo. Pero su fortuna, su suerte y su destino eran sus compañeros de viaje. No hacía falta más. Ese era su viaje ideal.


Un clásico del rock catalán: L'Empordà, de Sopa de Cabra.

Nascut entre Blanes i Cadaqués,
molt tocat per la tramuntana.
D'una sola cosa pots estar segur:
quant més vell més tocat de l'ala.

Sempre deia que a la matinada es mataria
però cap al migdia anava ben torrat.

Somriu i diu que no té pressa,
ningú m'espera allà dalt.
I entrar a l'infern no m'interessa,
es molt més bonic l'Empordà.

Varen passar ampolles i anys
i en Siset encara aguantava,
dormint la mona a la vora del Ter,
però ell mai no s'hi tirava.

Sempre deia que a la matinada es mataria
però cap al migdia anava ben torrat.

Somriu i diu que no té pressa,
ningú m'espera allà dalt.
I entrar a l'infern no m'interessa,
es molt més bonic l'Empordà.

I quan veig la llum de l'alba
se'm treuen les ganes de marxar.
Potser que avui no em suïcidi,
potser ho deixi fins demà.

miércoles, 13 de abril de 2011

Eurodiputados y Las mil y una noches


Dejadme que os narre un cuento. Es uno que se escribió hace mucho tiempo, pero que, como tantas cosas, vuelve a formar parte de la más candente actualidad. Este cuento se llama Alí Babá y los 750 eurodiputados (versión adaptada a los tiempos difíciles).

Alí Babá era un desgraciado mileurista con una jornada laboral de más de 10 horas muy mal retribuidas. Un día, de vuelta a su casa, se paró en un quiosco para comprar un diario, cosa que, a decir verdad, no acostumbraba a hacer. Muy sorprendido, en las primeras páginas, leyó lo siguiente: Los eurodiputados rechazan congelar sus salarios y dejar de viajar en primera. Siguió leyendo y su perplejidad no dejaba de ir en aumento: que si cobran 6.300 euros netos al año (¡ojo! ¡Impuestos ya deducidos!), que si les dan 300 euros cada vez que se reúnen, que si tienen un salario de 4.300 euros al mes sólo para dietas...

Alí Babá, con una cara de frustración que podía verse desde Google Earth, no quería enfadarse, pero ¡ay! si se cruzaba a uno de ellos... Y mira qué casualidad (esto suele pasar en los cuentos) que 2 minutos después le pareció cruzarse con uno de ellos por la calle. Sí, era él, el de la foto del periódico. Sí, uno del PP que declaró que “Viajar en business es una necesidad”. Ya te diría yo lo que es una necesidad... Alí Baba, que no era rico pero sí joven y taimado como para seguirlo y cotillear la conversación telefónica que mantenía el eurodiputado popular, escuchó cómo le decía a un secuaz suyo que iban a recortar en Sanidad para poder mantener su humilde nivel de vida entre carcajadas y desprecios varios al populacho.

Rápidamente, y bastante preocupado, Alí Babá llamó a su hermano Casim, que era médico. Le costó muchos años y esfuerzo sacarse su carrera y ahora su puesto peligraba. No era mucho más que mileurista (los jóvenes lo suelen ser, por muy preparados que estén...) pero amaba su trabajo. Casim se reunió con el resto de sus compañeros y decidieron cortar uno de los accesos de entrada a la gran ciudad donde trabajaba, justo delante del hospital donde pasaba consulta, como reivindicación. Se reunieron cientos y cortaron el tráfico. La policia no tardaría en llegar y llevarse detenido a Casim, según ellos, por resistencia a la autoridad y no sé qué otras chorradas varias. Alí Babá no podía creerlo. Su hermano sólo defendía lo que era suyo y ahora había sido diplomáticamente extorsionado para que contara cómo se había enterado de aquel ajustillo, ya que lo identificaron como el líder de una revolución emergente.

Alí Babá no podía hacer nada por su hermano ya que ahora era él a quien habían relacionado como la fuente de la filtración. No tardarían los de tan noble partido político en ir a por él. Intentaron hacerle abonar a Hacienda una cantidad prohibitiva para él por "error", aunque Morgiana, la inteligentísima prima de Alí Babá, que era funcionaria, pudo solventar tal eventualidad. Un día, el reputado eurodiputado se presentó en casa de Alí Babá y pico su puerta, que se abrió como por obra de un Ábrete sésamo. Le exigió todo tipo de explicaciones y le invitó a no seguir comentando nada de aquello. Alí Babá, con una tranquilidad pasmosa, le comentó que aquello sería de dominio público en pocas horas. Enfurecido, el eurodiputado le regaló unos cuantos improperios y comentarios despectivos que hizo extensivos a todos aquellos que compartían el mismo poder adquisitivo que Alí Babá.

El eurodiputado se fue, pero gracias (una vez más) a la astucia de Morgiana, no sólo serían de dominio público sus planes sino también sus palabras. Escondida tras la puerta había podido grabar la conversación entera. Al día siguiente, los telenoticias se hicieron eco del suceso y lo retransmitieron a todo el país, que quedó estupefacto (y bastante irritado). El partido del pobre eurodiputado no tuvo más remedio que sustituirlo, ya que la presión mediática no les ofrecía otra salida. Pobre diablo, arrojado a la vulgaridad del pueblo llano y a sufrir los azotes de una vida con más de una necesidad (es decir, unas cuantas más dejando aparte la de volar en business...).

Sherezade debe de estar flipando a la vez que piensa aquello de "Cree el eurodiputado que todos son de su condición"...


Foo Fighters, The pretender:

Keep you in the dark
You know they all pretend
Keep you in the dark
And so it all began

Send in your skeletons
Sing as their bones go marching in... again
The need you buried deep
The secrets that you keep are ever ready
Are you ready?
I'm finished making sense
Done pleading ignorance
That whole defense

Spinning infinity, boy
The wheel is spinning me
It's never-ending, never-ending
Same old story

What if I say I'm not like the others?
What if I say I'm not just another one of your plays?
You're the pretender
What if I say I will never surrender?

What if I say I'm not like the others?
What if I say I'm not just another one of your plays?
You're the pretender
What if I say I will never surrender?

In time or so i'm told
I'm just another soul for sale... oh, well
The page is out of print
We are not permanent
We're temporary, temporary
Same old story

What if I say I'm not like the others?
What if I say I'm not just another one of your plays?
You're the pretender
What if I say I will never surrender?

What if I say I'm not like the others?
What if I say I'm not just another one of your plays?
You're the pretender
What if I say I will never surrender?


I'm the voice inside your head
You refuse to hear
I'm the face that you have to face
Mirrored in your stare
I'm what's left, I'm what's right
I'm the enemy
I'm the hand that will take you down
Bring you to your knees

So who are you?
Yeah, who are you?
Yeah, who are you?
Yeah, who are you?

Keep you in the dark...

lunes, 4 de abril de 2011

Edad de oro


Soy de aquellos defensores de que la edad de las personas no viene en el DNI sino que la juventud se puede conservar en el interior durante mucho tiempo (de igual forma, hay viejos prematuros). Pero hay dos cosas que delatan la edad real de una persona mayor: su aspecto físico (obvio...) y su comportamiento y expresiones peculiares. Y este segundo punto me fascina.

¿Os habéis fijado que nuestros mayores muchas veces se comportan como niños? Tengo una teoría algo extravagante pero no por ello incierta: creo que la madurez máxima se alcanza a una cierta edad a partir de la cual vamos volviendo a ser niños. ¿Con qué emoción recibe un abuelo sus regalos de Reyes o de cumpleaños? ¿Cómo se emocionan cuando los vas a ver (ya que voy de higos a brevas...)?

Pensad en aquellas señoras que tienen 8 hijos y se escandalizan cuando oyen hablar de sexo. Dulce contradicción... O en su habilidad estrella adquirida con los años: ofrecerte comida a cualquier hora y en cantidades más que razonables. Si no comes malo: ¡es que estás muy delgado! Esa pasión de las abuelas por la prensa rosa y el papel couché, y sus respectivos que, aunque nieguen con la cabeza en público, están a la última en las aventuras y desventuras de la Esteban. Y ese abuelo que aprovecha las comidas familiares y los grandes eventos para contar aquellas divertidísimas anécdotas de la mili que se parte explicando (aunque siempre sea la misma y la gracia de ésta sea muy limitada, ¡claro!).

Pero yo me quedo con sus expresiones peculiares. A quien no le han dicho alguna vez aquello de Levántate del suelo que vas a coger frío en los riñones y te vas a encostipar. Recuerdo esa frase de cuando era niño a la vez que mi abuela me ofrecía un piti-suí. O aquella de No corras que si ancaso te caes te vas a hacer mal. O ésa de No me toques la cabeza que me dispeinas. Y luego están las palabras difíciles: palabras trabaléngüicas imposibles de pronunciar a ciertas edades. Otras son realmente fáciles, pero el toque viejuno (con cariño) las hace más entrañables. Véase almóndigas por albóndigas (mi abuela lo deja en pelotillas, que es mucho más aclaratorio); mondarinas por mandarinas; chechu por ketchup; mimbrar por vibrar (¡sí, sí, el móvil mimbra!); el interné por Internet; y Güis Prisli por Elvis Presley. Mi abuelo incluso me llamaba Pepito (resulta que mi nombre le parecía muy complicado y Pepe es un nombre comodín inconfundible).

Y no solo palabras. También dominan los refranes y las expresiones populares con una facilidad pasmosa. ¡Pero no voy a entrar ahora en ellas que no acabo ni mañana!

A ver si os animáis y enviáis las expresiones y palabras viejunas que hayáis oído por ahí, que quizás podamos hacer una sección bien apañá (empiezapore@gmail.com). ¡Sed felices esta semana también!


Un poco de Radiohead y su Creep:

When you were here before
Couldn't look you in the eye
You're just like an angel
Your skin makes me cry
You float like a feather
In a beautiful world
And I wish I was special
You're so fuckin' special

But I'm a creep, I'm a weirdo.
What the hell am I doing here?
I don't belong here.

I don't care if it hurts
I want to have control
I want a perfect body
I want a perfect soul
I want you to notice
When I'm not around
You're so fuckin' special
I wish I was special

martes, 29 de marzo de 2011

Ese otro "yo"


Ya es casi miércoles. Mi “yo interior” empieza a despertarse legañoso. Me había abandonado, odia los lunes y aún más los martes (que son los nuevos lunes sin duda...) pero su letargo va acabando al acercarse el ecuador de la semana. No despierta de golpe, es algo gradual. Tiende a animarse más por la tarde y la noche. Es impulsivo, divertido e impredecible.

Se prepara para el fin de semana. Quiere ver la luz del sol... y de la luna. Le encanta estar rodeado de gente que se ría con él y odia la seriedad. Ha desarrollado un fino olfato para seguir rastros de entretenimientos varios y tiene la habilidad de desconectar al cerebro que rige mi “yo racional”.

No puedo hacer nada para pararlo. Cuando despierta toma el control y es difícil de aplacar. Sólo en contadas ocasiones le convenzo de lo incorrecto de su actitud. Pero no tardará en volver a las andadas. A decir verdad, la gran mayoría de veces no quiero detenerlo. Me gusta, me cae bien. Le da un toque de color a una rutinaria vida gris. “Déjale que pinte”, pienso. Cada cual tiene sus hobbies.

Está aquí. El fin de semana está más cerca. Te he estado esperando con ansia. Bienvenido de nuevo. Adiós tediosa rutina...


Hoy toca una de esas canciones que me animan con sólo escuchar unas notas y que tiene una letra más que interesante. Release me, de Agnes.

Release me
Release my body
I know it's wrong
So why am I with you now
I say release me
'Cause I'm not able to
Convince myself
That I'm better off without you

Yeah, it's perfectly clear
That love's not what you need
I tell you I don't care
But I don't want to
Anything that you say
I hear myself agree
And I don't recognize
What i've turned into

I don't know why I want you so
'Cause I don't need the heartbreak
I don't know what addictive hold
You have on me I can't shake
No, I'm not in control
So let me go


Release me
Release my body
I know it's wrong
So why do I keep coming back
I say release me
'Cause I'm not able to
Convince myself
That I'm better off without you

I could sleep by myself
It would burn me alive
Find me somebody else
But I don't want to
Try to leave out the love
That goes againt the grain
But I can rationalize it
If I have to

I don't know why I want you so
'Cause I don't need the heart break
I don't know what addictive hold
You have on me I can't shake
No, I'm not in control
So let me go


Release me
Release my body
I know it's wrong
So why do I keep coming back
I say release me
'Cause I'm not able to
Convince myself
That I'm better off without you